Tabla de contenido
Los aros de cebolla son un aperitivo y guarnición muy popular, especialmente en la comida rápida estadounidense. Consisten en cebollas rebanadas, rebozadas o empanizadas, y fritas hasta que quedan doradas y crujientes.
En apariencia, un aro de cebolla clásico luce exactamente como suena: un aro transversal de cebolla, generalmente de cebollas grandes amarillas o blancas, recubierto de una capa crujiente y sabrosa. Apilados en un plato con un ramequín de kétchup o una salsa especial para mojar al lado, los aros de cebolla son un alimento reconfortante que evoca imágenes de cafeterías, barbacoas en el jardín y hamburgueserías. Ofrecen un contraste satisfactorio entre la cebolla dulce y tierna del interior y el exterior salado y crujiente.
Rastreando las raíces de los aros de cebolla
El origen exacto de los aros de cebolla es un tanto confuso, con múltiples relatos que se remontan a diferentes lugares y épocas. Una receta temprana, similar a los aros de cebolla modernos, fue publicada en 1802 en un libro de cocina británico de John Mollard. La receta de Mollard, titulada "Cebollas fritas con queso parmesano", consistía en rebozar rodajas de cebolla en una masa de harina y parmesano, freírlas en manteca y servirlas con una salsa de mostaza y mantequilla. Esto sugiere que el concepto de cebollas fritas rebozadas existe desde hace al menos dos siglos.
Una afirmación posterior proviene de un anuncio de 1933 en The New York Times Magazine que promocionaba “aros” de cebolla fritos como una novedosa idea para cocinar en casa.
En las décadas de 1940 y 1950, los aros de cebolla aparecieron en los menús de los autocines y restaurantes de todo Estados Unidos como alternativa a las patatas fritas.
Un error común atribuye a la cadena de restaurantes Pig Stand de Texas (fundada en 1921) la invención de los aros de cebolla. En realidad, los popularizaron a nivel nacional a través de los autocines, pero no los inventaron.
Para la segunda mitad del siglo XX, los aros de cebolla se habían consolidado como un clásico de Norteamérica, y también se habían extendido al extranjero. Hoy en día, se disfrutan en Canadá, el Reino Unido, Australia y otros países en menús de estilo occidental.
Cómo se hacen los aros de cebolla
Hacer aros de cebolla es sencillo, pero admite variaciones. Se corta una cebolla grande transversalmente en aros de entre 6 mm y 1,25 mm de grosor.
Los consejos de preparación incluyen:
- Remojar los aros de cebolla crudos en agua fría o suero de leche para reducir el picante y agregar humedad.
- Puede elegir entre dos estilos principales de recubrimiento: rebozado o empanado.
Una masa clásica podría incluir:
- Harina.
- Un líquido como agua, leche o cerveza.
- Condimentos como sal, pimienta, pimentón o ajo en polvo.
Los anillos se rebozan y se fríen en aceite caliente a unos 175 °C (350 °F) hasta que estén crujientes. Como alternativa, para un estilo empanizado, se rebozan en huevo o leche y luego se rebozan en harina sazonada o pan rallado antes de freírlos.
Los anillos rebozados suelen ser más esponjosos y tener una corteza uniforme, mientras que los empanizados ofrecen una textura más crujiente. En cualquier caso, freírlos rápidamente transforma la aspereza de la cebolla cruda en algo suave y ligeramente dulce.
La cebolla debe ablandarse lo suficiente como para que se pueda morder fácilmente, conservando su textura. Una pizca de sal recién salida de la freidora realza el sabor.
¿Por qué los aros de cebolla saben dulces? El proceso de fritura libera los azúcares de la cebolla mediante la caramelización y la reacción de Maillard, lo que produce esos deliciosos compuestos de sabor.
¿Por qué los aros de cebolla son tan populares?
Los aros de cebolla son un lujo estadounidense por excelencia, frecuentemente acompañados con hamburguesas o se sirven como aperitivos de bar. En Estados Unidos y Canadá, se ofrecen en cadenas de comida rápida, restaurantes y festivales.
Los lugares y formas notables incluyen:
- La “cebolla floreciente” en ferias y restaurantes.
- Comida de pub en el Reino Unido.
- Versiones congeladas de supermercado para hornear en el horno de casa.
- Guarniciones en Australia y Nueva Zelanda con hamburguesas o pescado y patatas fritas.
Las cadenas occidentales de comida rápida introdujeron los aros de cebolla en Asia, por lo que ahora se venden como refrigerio en lugares como Singapur o Filipinas. En algunas tiendas de conveniencia asiáticas, se venden variantes como chips de aros de cebolla sazonados con algas o chile.
En países como Francia o Italia, los aros de cebolla son poco comunes fuera de los restaurantes de temática estadounidense. Su auge global refleja la influencia de la comida casera y la cultura gastronómica informal.
Curiosidades sorprendentes sobre los aros de cebolla
El aro de cebolla incluso tiene su propia festividad gastronómica. El Día Nacional del Aro de Cebolla se celebra en Estados Unidos el 22 de junio.
Otros datos curiosos incluyen:
- Los aros de cebolla han aparecido en concursos de comida competitivos.
- Algunos chefs utilizan cebollas rojas o chalotes para obtener aros más dulces o más pequeños.
- Las “tiras de cebolla” son variantes cortadas en rodajas finas que se utilizan como aderezo para hamburguesas.
Las salsas populares además del ketchup incluyen:
- Aderezo ranch.
- Mayonesa chipotle.
- Alioli de ajo.
- Salsa picante de “cebolla floreciente”.
Un giro inesperado: en 2014, un grupo de hackers usó "Onion Ring" como nombre clave, un juego de palabras con Tor (The Onion Router). Incluso los círculos de ciberseguridad han reconocido este crujiente refrigerio.
Ya sea que se sirvan en un drive-thru o en un camión de comida gourmet, los aros de cebolla siguen siendo un capricho delicioso para los dedos grasosos que continúa encantando a generaciones de amantes de la comida en todo el mundo.