Calienta el aceite de oliva en una cacerola grande a fuego medio. Agrega la cebolla roja picada y sofríela durante unos 5 minutos, hasta que esté tierna y translúcida.
2 cucharadas de aceite de oliva, 1 cebolla morada grande
Incorpore el ajo picado y cocine durante un minuto más, hasta que desprenda un aroma agradable. Añada la zanahoria cortada en dados y cocine durante 2-3 minutos, dejando que se ablande un poco.
3 cucharaditas de ajo picado, 1 zanahoria
Espolvoree el orégano, el condimento italiano, el azúcar, la sal, la pimienta negra y las hojuelas de chile. Revuelva bien y deje que las especias se tuesten durante unos 30 segundos para que liberen su sabor.
2 Cucharadas de orégano seco, 2 cucharadas de condimento italiano, 1 cucharadita de azúcar, 1/2 cucharadita de sal, 1/2 cucharadita de pimienta negra molida, 1/4 cucharadita de hojuelas de chile
Añade los tomates ciruela enlatados, desmenuzándolos suavemente con una cuchara al verterlos en la sartén. Incorpora el puré de tomate y el agua, y luego mezcla todo.
800 gramos de tomates ciruela, 2 Cucharadas de puré de tomate, 250 mililitros de agua
Ponga la salsa a hervir a fuego lento y déjela cocinar sin tapar durante 15 a 20 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que la salsa espese un poco.
Una vez cocida, use una licuadora de inmersión para licuar la salsa directamente en la olla hasta que quede suave. Si no tiene una, transfiera la salsa con cuidado a una licuadora y licúe hasta obtener la consistencia deseada.
Pruebe la salsa y ajuste el condimento a su gusto: agregue más hojuelas de chile para un toque más picante o una pizca más de sal y pimienta si es necesario.
¡Tu salsa picante para pizza está lista! Úntala sobre la masa de pizza, mézclala con la pasta o guárdala para usarla más tarde.
Notas
Consejos y trucos
La textura importa: Si prefieres una salsa con más consistencia, licúa solo la mitad y vuelve a mezclarla con la sartén.
Preparar con antelación: Esta salsa se puede preparar con antelación y guardar en el refrigerador hasta por 5 días, o congelar hasta por 3 meses.
Potencia el sabor: Añade un chorrito de vino tinto o vinagre balsámico mientras cocinas a fuego lento para darle más profundidad.
Dale un toque picante: ¿Prefieres un toque picante? Duplica las hojuelas de chile o añade chile fresco picado.
Utilice tomates de calidad: Los buenos tomates ciruela enlatados hacen una gran diferencia en sabor y riqueza.